En 1912 se conoce la existencia de un equipo perteneciente a la BBC del que era capitán el también farmacéutico Antonio Cisneros Platero, en esta misma fecha se relacionan los equipos locales de El Tigre y El Copey.
En la práctica del béisbol en Madruga se pone de manifiesto la discriminación racial, expresión de ello fue el Club Martí, dirigido por Miguel Salmón de Madruga, el primero de estos se encontraba integrado por madrugueros negros, el Liceo representaba a los blancos. En 1928 aparece el club del central “San Antonio”, “Los Elefantes”, dirigido por Armando Pérez y en el que se destacó la figura de Felipe Larramendi, a quien le faltaba un brazo producto de una malformación congénita, las habilidades que desarrolló le permitió ganar simpatías de los seguidores del béisbol; los desafíos entre “Los Elefantes” y el Club Deportivo de Aguacate atrajo la atención de los fanáticos por la presencia de dos mancos, Diego Marturas que jugaba el jardín central por los aguacatences y el local Felipe Larramendi, en una exhibición de maestría por ambos jugadores.
Recuerdan los veteranos de la pelota un inolvidable desafío; los aguacatences querían desquitarse de las derrotas que le proporcionó el club de “Los Elefantes” y concertaron un desafío en el verano de 1929, pero al llegar los madrugueros al terreno del lugar del Club Deportivo Rosario se encontraron con un club de profesionales en la cual una gran mayoría lo constituían jugadores del Almendares.
Se produjo entonces la protesta de “Los Elefantes”, pero al fin decidieron jugar respondiendo a la aprobación del director, “si perdemos muchachos perdemos con el Almendares, pero no les será fácil derrotarnos”.
Los Elefantes se llenaron de amor propio y se crecieron en el terreno, el lanzador fue Isidro Fabré que no pudo dominar a los madrugueros y el juego terminó 2 por 0 a favor de Los Elefantes; y el estelar Fabré expresó consternado “me han ganado con ocho jugadores y medio”, refiriéndose al manco Felipe que batió tres hits de cuatro veces al bate.
Equipo del Deportivo Rosario estuvo integrado por:
Izquierdo C Amateur
Fabré P Profesional
Neno Cuevo 1a Profesional
Manuel Zaldivar 2a Amateur
Cuco Alfonso 3a Profesional
Martín Dihigo SS Profesional
Llino González LF Amateur
Lori CF Profesional
Ruíz Sánchez RF Profesional
Equipo “Los Elefantes”
Agapito del Sol C
Scull P
Pérez 1a
Jacinto Pérez 2a
Angel Pérez 3a
El Coquero SS
Felipe Illarramendi LF
Pica (Quindembo) RF
Aquino Pérez RF
Dtor. Armado Pérez
En esta época se fundó la Copey Sport, como se puede apreciar los intentos del norte americanizar al pueblo de Cuba con la imposición del idioma inglés se pone de manifiesto; este equipo tenía su terreno de juego al costado de la actual Secundaria Básica “América Latina”.
Entre los promotores de la práctica beisbolera en el antiguo municipio de Madruga, se encuentran presentes representantes de la burguesía madruguera, este hecho no es una particularidad, casos análogos se encuentran en otras municipalidades, ello dado por la expresión psicológica de esta clase en mostrar su presencia como sector social movido por los más disímiles intereses; la firma de cigarros Trinidad y Hermanos, de la que era accionista Amado Gabriel, quien posteriormente va a tener intereses económicos en la región, va a patrocinar el equipo homónimo que en noviembre de 1936 esta integrado por:
Pepe Artiles
Felipe Illarramendiz
Efreín Estévez
Rogelio (Panseria)
Angelo Pérez
Juan L. Hernández
Segundo Hernández
Votó
Llerena
Vasallo
Cándido López (Coach)
Antonio Cisneros (Director)
Segundo Ojeda (Árbitro)
En este equipo jugaba un pelotero de San José de Las Lajas de apellido Vasallo y se destacaba nuevamente proveniente de “Los Elefantes”, del central San Antonio el jardinero izquierdo Felipe Illarramendiz, el terreno de juego de este equipo se encontraba en el lugar que hoy ocupa la Terminal de Ómnibus.
En esta época la Compañía de Cigarros “José L. Piedra”, de la que era representante en la zona de Manuel Rodríguez, vecino del ingenio San Antonio, va a patrocinar y crear una competencia de béisbol juvenil José L. Piedra.
El País Gráfico, en sus ediciones recogía el entusiasmo beisbolero del municipio reportando el resultado de los siguientes juegos:
13 de enero de 1937: en los terrenos de San Antonio Park el desafío de béisbol entre Partagas de Madruga y el Ceiba Mocha Club, resultando vencedores los visitantes con anotación de 10 por 9.
Ceiba Mocha 002 006 110 10
Madruga 514 000 000 9
14 de junio de 1937: se celebró en el terreno del Entronque un reñido desafío de base ball entre los potentes equipos José L. Piedra y Club Juveniles del vecino pueblo de Aguacate, resultado victorioso a los aguacateros con la anotación de 2 por 1.
Juveniles | V | C | H | O | A | E | José L. Piedra | V | C | H | O | A | E |
Ferrera E | 4 | 1 | 0 | 2 | 0 | 0 | O’ farrill SS | 4 | 0 | 0 | 3 | 2 | 0 |
Vázquez 2a | 4 | 0 | 0 | 1 | 1 | 0 | Dimas CF | 4 | 0 | 0 | 0 | 0 | 2 |
Garabá CF | 4 | 0 | 0 | 2 | 0 | 0 | Paradela 1a | 4 | 0 | 0 | 9 | 0 | 0 |
Martínez LF | 4 | 0 | 1 | 1 | 0 | 0 | R. Toboso 3a | 4 | 0 | 0 | 2 | 0 | 0 |
Tata SS | 3 | 0 | 0 | 2 | 1 | 0 | Fermín RF | 4 | 0 | 0 | 2 | 0 | 0 |
Argis 3a | 3 | 0 | 0 | 3 | 0 | 0 | Valetín C | 4 | 1 | 2 | 3 | 0 | 0 |
Marineros CF | 4 | 0 | 1 | 1 | 0 | 0 | O’farrill 2a | 4 | 0 | 0 | 2 | 0 | 1 |
González 1a | 4 | 1 | 1 | 10 | 1 | 0 | San Emeterio LF | 3 | 0 | 1 | 0 | 0 | 0 |
Viejo P | 4 | 0 | 0 | 2 | 0 | 0 | Hernández P | 4 | 0 | 0 | 2 | 0 | 0 |
Diego RF | 3 | 0 | 0 | 2 | 0 | 0 | Meneses LF | 2 | 0 | 0 | 1 | 0 | 0 |
Totales | 37 | 2 | 3 | 27 | 3 | 0 | Totales | 37 | 1 | 3 | 24 | 2 | 3 |
Anotación por entradas:
Juveniles 000 010 001 2
José L. Piedra 000 100 000 1
Fuentes: Delgado, Rafael. Compilación de noticias sobre Madruga publicado en “El País Gráfico”. Museo Municipal de Madruga.
30 de junio de 1937: “… en los terrenos del Picolino Park (se celebró) un magnífico juego de base ball entre las… novenas Picolino Juvenil y Jalisco de la localidad, resultando vencedores los primeros con score de 15 por 7”.
V | C | H | A | E | V | C | H | A | E | ||
R. Albelo 2a | 5 | 2 | 2 | 1 | 1 | T. Ruges C | 4 | 2 | 1 | 0 | 1 |
M. Moro C | 5 | 2 | 4 | 0 | 0 | L. Campos 1a | 3 | 1 | 1 | 0 | 0 |
J. Marrero 3a | 5 | 4 | 4 | 0 | 0 | N. Figueroa CF | 4 | 1 | 2 | 2 | 0 |
B. Ojeda SS | 4 | 4 | 4 | 4 | 0 | R. López 3a | 4 | 1 | 2 | 1 | 1 |
R. Collado 1a | 4 | 2 | 3 | 0 | 0 | H. Ruíz RF | 4 | 1 | 0 | 0 | 0 |
C. Valle CF | 5 | 0 | 1 | 0 | 0 | A. Glez 3a | 3 | 1 | 0 | 0 | 0 |
C. Mora P | 4 | 0 | 1 | 0 | 0 | S. O’farrill SS | 4 | 0 | 0 | 2 | 1 |
O. Ramos RF | 2 | 0 | 0 | 0 | 0 | P- O’farrill P | 4 | 0 | 0 | 1 | 0 |
F. Nuñez LF | 2 | 1 | 1 | 1 | 0 | R. Iglesias LF | 3 | 0 | 0 | 0 | 0 |
Totales | 36 | 15 | 20 | 6 | 1 | Totales | 38 | 7 | 6 | 6 | 4 |
Anotaciones por entrada:
Picolino 201 200 532 15
Jalisco 032 010 110 7
Fuentes: Delgado, Rafael. Compilación de noticias sobre Madruga publicado en “El País Gráfico”. Museo Municipal de Madruga.
29 de enero de 1938: encuentro en Madruga entre los equipos Catalina y el Yankee Clipper de la localidad resultando ganadores los madrugueros 9 por 7.
Catalina | V | C | H | O | A | E | Yankee Clipper | V | C | H | O | A | E |
F. Soto 2a | 2 | 2 | 0 | 0 | 2 | 1 | M. Figueroa C | 3 | 2 | 3 | 2 | 0 | 1 |
S. Delgado LF | 4 | 0 | 3 | 2 | 0 | 0 | H. Secaro 3a | 3 | 1 | 1 | 0 | 1 | 0 |
T. Sandino 3a | 3 | 2 | 1 | 0 | 0 | 1 | E. Corzo LF | 3 | 0 | 0 | 3 | 3 | 0 |
C. Pérez SS | 3 | 0 | 2 | 2 | 1 | 1 | A. Mateo SS | 2 | 1 | 2 | 0 | 2 | 2 |
G. Negrín | 1 | 1 | 0 | 9 | 0 | 0 | C. Valera 1a | 3 | 0 | 0 | 10 | 0 | 0 |
V. Pérez CF | 2 | 1 | 2 | 0 | 0 | 0 | F. Ungue CF | 3 | 1 | 0 | 2 | 0 | 0 |
R. Lima P | 2 | 1 | 2 | 0 | 0 | 0 | F. Nuñez 2a | 3 | 1 | 2 | 2 | 0 | 1 |
P. Pedro RF | 2 | 0 | 0 | 2 | 0 | 0 | A. Barrios RF | 3 | 2 | 2 | 3 | 0 | 0 |
G. López C | 2 | 0 | 0 | 4 | 1 | 1 | C. Rguez P | 3 | 1 | 1 | 2 | 0 | 0 |
A. Menea P | 1 | 0 | 0 | 5 | 0 | 0 | C. Barroso P | 2 | 0 | 1 | 3 | 0 | 0 |
Totales | 22 | 7 | 10 | 24 | 4 | 6 | Totales |
Anotaciones por entrada:
Catalina de Güines 203 002 000 7
Yankee Clipper 020 033 01x 9
En 1938, Arístides Pumariega, padre del destacado humorista homónimo, Roberto Pérez, Manuel García Jorge y el comerciante Carlos del Rey, crean la sociedad deportiva Club Atlético con el objetivo de impulsar la práctica deportiva en la localidad.
Aunque en Madruga la práctica deportiva era incitada por la pequeña burguesía local, llama la atención como los peloteros locales eran huérfanos en cuanto a las áreas donde practicar este deporte, siendo en todos los casos fincas preparadas de forma sencilla por los propios jugadores.
En la década de 1930, un inválido llamado Gustavo Vallín, deseoso de fomentar un club de pelota seleccionó a un grupo de jóvenes que jugaban en los distintos placeres del pueblo relacionándose entre ellos José Ojeda, Santiago Carballo, Eliseo Lamar, Gustavo Montes, Dimas Amorós, Aurelio Figueroa, Angel Lorenzo, Reinaldo Collado, Beresel Ojeda, Valentín Cruz, Apolinar Marrero y como colaboradores Raúl Marrero (Curvita) y Julio Rodríguez, coautor de esta historia encargado de concretar los juegos con otros quipos.
Una vez organizados acuerdan dirigirse al ciudadano Diego Ruiz, propietario de varios terrenos para pedirle su colaboración, con el fin de que les facilite un pedazo de terreno de los tantos que tenía, para ellos tener un lugar donde poder realizar sus juegos, este señor después de escucharlos le responde que lo único que él puede proporcionarle o sea arrendarle es un guayabal que se encontraba en la parte izquierda de la casa de Capó y por la derecha, con el llamado camino de La Majagua, hoy desaparecido, que si ellos se comprometían a limpiarlo se los entregaba. Este terreno no le servía al señor Ruíz para sembrar ni tampoco como potrero por la cantidad de aromas y matas de guayabas que poseía, aquel grupo entusiasmado aceptó la oferta y sin esperar más caen allí con machetes en mano desmontando aquel tupido matorral, una vez que quedó limpio, al no tener herramientas se dieron a la tarea de pedir prestados picos y guatacas para sacar las raíces, terminado este trabajo, que fue muy agotador, estos muchachos de un lugar cercano arrastran en yaguas cantidad de cocó hasta que pudieron conseguir una carretilla para rellenarlo, pero la labor de ellos no terminó aquí, porque una vez emparejado su campo hay que cercarlo y carecen de todos los medios, pero no se amilanaron y se lanzan a recoger guano seco para la cerca, ya terminada eta labor, no se conforman y quieren levanta una especie de glorieta para ofrecerle alguna sombra a los fanáticos y de nuevo van al campo a buscar caña brava que al no tener en qué la trasportan ellos mismos arrastrándola desde lejos con la cual levantan su glorieta que resultó ser muy criolla.
Después de todas esas vicisitudes ya tienen un terreno en condiciones para jugar, pero tienen que enfrentarse a un nuevo problema, no tienen trajes, de nuevo se reúnen y acuerdan dirigirse a distintos carreros que en aquella época distribuían distintas marcas de cigarros y cervezas, a los cuales hacían grandes propagandas con el fin de que los ayudaran regalándoles los trajes, con el compromiso de ponerle al club el nombre del producto que se lo obsequie, pero estas gestiones resultaron negativas, no se decepcionaron por este incidente y acuerdan dirigirse la Alcalde del pueblo para pedirle su ayuda, pero con él tampoco lograron nada. En vista de estos contratiempos, Gustavo Vallín los reúne en el mismo terreno y les plantea no hacer más gestiones, no pedir más nada a nadie, tratando de adquirirlos ellos mismos como pudieran y a la vez les sugiere hablar con el dueño del Cine Patria para conseguir una función en beneficio del club, para con lo recaudado comprar los trajes y algún equipo, esta idea los reanimó y de allí partieron para hablar con dicho propietario, gestión que esta vez fue favorable, organizaron la función y entre todos vendieron las entradas con lo cual recaudaron algún fondo utilizándolo para comprar sacos de harina en la panadería para hacer sus trajes y comprar algunos equipos.
Para esta función el dueño del cine les trajo una película musical muy bella titulada Picolino, la cual vieron casi todos los integrantes del club, ya tenían la tela pero se les presenta otro problema, no tienen dinero para hacer sus trajes, pero tratando de vencer todas las dificultades acuerdan que cada uno se haga el suyo como pueda y se confeccionaron en las casas de ellos con un letrero rojo muy llamativo que llevaban en el pecho ideado por José Ojeda (Cheito).
Cuando fueron a designarle nombre a la novena acordaron llamarle Picolino, porque fue con este filme que se obtuvo el dinero necesario para completar el equipo y los uniformes.
El equipo esta integrado por los siguientes jugadores:
José Ojeda Angel Lorenzo
Santiago Carballo Reinaldo Collado
Eliseo Lamar Berisel Ojeda
Gustavo Montes Valentín Cruz
Dimas Amorós Apolinar Marrero
Aurelio Figueroa
Posteriormente van a ingresar en el equipo Andrés Escobar, Juan Pérez, Mario Torres, José Cabrera, Juan L. Hernández, José Torres (Cucho), Ether Morales (Tinta), Juan Berrios (Tata), Lengue, Atanasio Arbelo (Pico) y Francisco O’farrill.
El alma de este equipo fue Miguel Moro, quien de su peculio personal sufragó en parte los viajes del equipo, compró pelotas y equipo y recibía en su casa a las novenas visitantes.
El equipo del Picolino gozó de gran popularidad en toda la provincia, en su terreno se celebraron grandes encuentros, muchos de ellos equipos semipro de la capital, que era la antesala del profesionalismo, enfrentándose y derrotando a jugadores destacadísimos como Wilfredo Salas, Andrés Fleitas, Jiquí Moreno, Armando Vázquez, Fajo y otros tantos.
De los integrantes de este equipo, José Ojeda va a formar parte de la novena de la Escuela de Artes y Oficios de La Habana que en 1946 realizó una gira por Guatemala donde ganaron 17 juegos, perdieron 1 y empataron otro.
La Liga Juvenil en Madruga.
El 23 de marzo de 1947, fue inaugurado en los terrenos por iniciativa del Centro Nocturno en la persona de Eladio Miguel Suárez Castillo el Campeonato Juvenil Local de Béisbol con la participación de cuatro equipos, Estrella Central, dirigido por Iraido Pino, Ases del centro Nocturno que tenía como manager a Surano Echenique y las novenas Estrellas Madrugueras y La Ley comandados respectivamente por Ricardo Amorós y Ramón Valdivies.
La primera bola fue lanzada por el alcalde municipal Andrés J. Capó Cordoví y recibida por el otrora pelotero local Paulino San Emeterio.
Este campeonato tuvo la pretensión de crear un Patronato Local Juvenil de Béisbol denominado Eusebio Miguel Cerveto quien inició en la localidad la práctica de este deporte que tuvo entre sus promotores a Eladio Miguel Suárez Castillos, iniciador, José Julio Leyva Cepero, director, José Fernández Castillo, secretario general, Nono Estevéz, anotador oficial José Marrero, árbitro.
Equipo | Ganados | Empatados | Perdidos |
Estrella Central | 4 | 0 | 1 |
Centro Nocturno | 2 | 0 | 3 |
Estrella Madruguera | 2 | 1 | 2 |
La Ley | 1 | 1 | 3 |
Para proporcionarle a los equipos un feliz desenvolvimiento del campeonato, los organizadores contaron con la colaboración de algunas personalidades e instituciones locales; la revista Antorcha el 15 de marzo de 1947 en su número 35 agradece la contribución de Antonio Palomares, Sociedad Liceo, Armando Pérez, Logia Conciliación, Silvio Dubrocá, José Pérez y al coronel del Ejército Libertador Eliseo Figueredo Mirabal, quien prometió donar el equipo Ases de Centro Nocturno un equipo completo de béisbol.
Este Patronato Local de Béisbol Juvenil inició una lucha en aras de dotar a Madruga de un Campo Deportivo, en la revista Antorcha del 15 de julio de 1947 No. 38, el editorial estuvo orientado a ello, el cual reproducimos a continuación.
El Campo Deportivo una necesidad local.
El extraordinario entusiasmo despertado por el reciente campeonato juvenil local de base ball, viene a revelar dos hechos evidentes: la inclinación de nuestras juventudes por el deporte y la necesidad en que se hayan nuestras autoridades responsables de canalizar esas actividades lúdicas juveniles, dándole oportuna satisfacción y encauzamiento, mediante la creación de un Campo de Deporte, que permita a todos los sin irritante excepción discriminatoria, un training adecuado y una ocupación útil y placentera del tiempo ocioso, al mismo tiempo que vigoriza su cuerpo para más elevados menesteres. Aún el más profano en materia educativa no puede escapar que no basta la educación intelectual, por lo común memorística y verbalista para lograr la armonía del niño y del adolescente, a fin de que estos reaccionen adecuadamente y desempeñen con eficiencia su rol en la vida ultra moderna del presente. La educación deba ser integral, es decir, cultivar y desarrollar a plenitud los poderes tanto en lo físico como en lo intelectual y moral tanto más cuando no puede concebirse una mente sana, a no ser en un cuerpo ágil, vigoroso, fuerte y sano.